martes, 11 de enero de 2011

Hispania y los romanos. John S. Richardson.

Esta entrada forma parte de un plan a muy largo plazo y que etiqueto como historia de Montilla. Hace más de un año comencé a leer una colección de libros de diversos autores sobre la historia de España y me propuse, apartede leer los 50 a así que son en orden cronológico, usando el índice alfabético de cada uno de ellos plasmar aquí todas las referencias a mi pueblo natal Montilla. Esta es ya la cuarta entrada. Es un poco ladrillo..., bueno vale es un ladrillazo pero el resultado final puede ser interesante.


PGs 105-106
Al llegar, se encontró a Cn. Pompeyo y a su hermano menor, Sexto, en el valle del Betis, el primero asediando la ciudad de Ulia, y el segundo en Córdoba. Es evidente, incluso por las noticias de las versiones más desfavorables para él,que son las únicas conservadas, que Gneo había seguido una política de mano dura con todos los cesarianos que encontró en las ciudades de la provincia. Aproximadamente en enero del 45, uno de los corresponsales de Cicerón lo calificaba de necio y cruel, y tras la llegada de César a la península torturó y ejecutó a todos los habitantes de la ciudad de Ucubi- la actual Espejo -, a los que consideraba sospechosos de favorecer a su adversario. En consecuencia en parte de este comportamiento, aunque sin duda también porque el resultado final de la lucha en esos momentos era bastante incierto, tenemos noticia de que algunos ciudadanos romanos de la provincia abandonaron el bando de Pompeyo. El volumen de estas deserciones, sin embargo, deberiamos situarlo en el marco de lo ocurrido dos meses después en la batalla de Munda, en la que, según parece, murieron 300 equites, algunos de los cuales procedian de Roma, mientras que el resto eran nativos de la provincia.
Después de la batalla de Munda, cuya localización exacta continua siendo objeto de debate, César pasó algún tiempo limpiando la provincia de pompeyanos. Córdoba, dividida por los enfrentamientos entre pompeyanos y cesarianos , cayó al fin tras ser sitiada. Cn Pompeyo se refugió en Carteya tras la derrota de Munda, pero cuando se enteraron de las proporciones que alcanzaba el dominio de César sobre la provincia, los habitantes de Carteya emepezaron a dudar si debían concederle protección o no.

Hay más referencias a Munda en el libro pero son sólo menciones de la batalla.